JUSTIFICACIÓN

JUSTIFICACIÓN

Los maestros y las maestras enfrentamos grandes retos para organizar y planear el trabajo en aula multigrado. La gran diferencia que existe en el aula multigrado y la unigrado, es que en la primera se atienden alumnos de diferentes grados, edades e intereses mientras que en la segunda sólo se atiende a un grado, sin embargo; esto no significa que el grupo sea homogéneo ya que aún en este caso existe una gran diversidad de saberes, necesidades e intereses de los alumnos.

 Los docentes que trabajan en grupo multigrado, deben preguntarse ¿Qué aprendizajes debe desarrollar cada niño o niña según su nivel?, ¿Qué textos y materiales necesitarán durante la sesión de trabajo?, ¿Qué estrategias y situaciones didácticas serán las más convenientes para cada tema o contenido?, ¿Qué indicadores utilizarán para evaluar los aprendizajes, los logros y las dificultades en cada grado?. Por si esto fuera poco, la Reforma Del Plan y Programas de estudio que está viviendo la Educación Primaria y que para implementarla el maestro de escuela unitaria debe analizar los materiales de los seis grados; parece complicar aún más su tarea. Todos estos aspectos exigen un gran esfuerzo de organización y planificación de los docentes comprometidos con los alumnos de estas escuelas.

El nuevo enfoque por competencias de los Programas de estudio 2009, exige que los docentes diseñemos situaciones de aprendizaje “reales”, donde los alumnos busquen soluciones a problemáticas que enfrentan cotidianamente. La perspectiva experiencial inspirada en Dewey (Posner 2004), se basa en el supuesto de que todo lo que le pasa a los estudiantes influye en sus vidas, y, por consiguiente, el currículo debería plantearse en términos amplios, no sólo en lo que puede planearse en la escuela e incluso fuera de ésta, sino en términos de todas las consecuencias no anticipadas de cada nueva situación significativa que enfrentan los alumnos. Así las consecuencias de cualquier exeriencia de aprendizaje no sólo implican lo que se aprende de manera formal , puntual o momentánea, sino los pensamientos, sentimientos y tendencias a actuar que dicha situación genera en los individuos que la viven y que dejan una huella perdurable. De esta manera, la filosofía de una enseñanza de corte experiencial descansa en la premisa de que si se consigue que la experiencia escolarizada se relacione más con la experiencia significativa de los estudiantes y resulte menos artificial, los estudiantes desarrollarán más y llegarán a ser mejores ciudadanos.

Lograr esto, implica que los docentes cambiemos nustras perspectivas de lo que es la enseñanza y el aprendizae, debemos enfocar nuestras prácticas a un ambiente más natural que permita a los niños relacionar lo que saben con nuevos conocimientos aplicables a su vida, esto es, el desarrollo del proceso enseñanza-aprendizaje desde la perspectiva del desarrollo de competencias.

Con el propósito de colaborar con la formación de los docentes que laboran en escuelas multigrado, se diseñó el Diplomado “Los retos de la escuela multigrado para el desarrollo de competencias en el marco de la RIEB”. El cual propicia el desarrollo de conocimientos, habilidades y actitudes específicas para el trabajo en grupo multigrado, entre ellos: la planeación y evaluación, estrategias didácticas innovadoras en estos contextos de gran diversidad; que propicien en los alumnos el desarrollo de competencias para la vida.

Durante el desarrollo de las sesiones se busca poner en situación a los docentes, confrontar su práctica con la de sus pares y con lo plantean los teóricos. Esto les permitirá ir modificando sus concepciones iniciales de lo que significa ser docente y de los elementos teórico metodológicos necesarios para contribuir en el desarrollo del perfil de egreso de los alumnos que asisten a estas escuelas.

A lo largo de las sesiones, se propiciará que los docentes asuman actitudes de responsabilidad, compromiso y ética, al comprender la importancia que representa un buen trabajo en las escuelas multigrado, pues los alumnos tienen derecho a recibir una educación de calidad.